Que lindo tenerte por acá 🙂
Me llamo Samanta, pero todos me dicen Sam (o Sami).
Nací en Bariloche un 28 de Julio y a pesar de eso siempre muero de frío.
Encuentro en la naturaleza ese lugar de paz e inspiración que muchas veces perdemos, aunque viva dentro nuestro.
Disfruto de la Tierra en este lugar tan alucinante en el que me abrazó la vida, porque la Patagonia es única y está repleta de magia.
Tengo mi casita en el bosque, donde anidamos con Nina (mi hijita), mi pareja y unos cuantos animalitos. Amo sentarme junto al fuego con un libro en la mano, ya sea de campamento o en el fogón de mi casa; hago fotosíntesis cada vez que puedo y el chocolate es mi principal fuente de energía.
Me gustan el cheesecake y el café con leche, amo comer casi tanto como contemplar un bello paisaje.
Viajar se me ha hecho adictivo. Conocer diferentes lugares y culturas ha sido siempre mi mejor escuela y una senda que me lleva a encontrarme conmigo misma.
Tengo un grupo de amigos maravilloso y una familia que me acompaña en cada paso. Me considero muy afortunada y creo que, a quien agradece, la vida le sonríe cada mañana.
I was born in Bariloche on July 28th, and funny enough, I’m always cold-even here!
Nature is my happy place, that peaceful spot full of inspiration we sometimes forget lives inside us. I’m lucky to call Patagonia home, a truly magical place that’s shaped who I am.
I live in a cozy cabin in the woods with my little girl Nina, my partner, and a bunch of 2 and 4 legs friends. I love curling up by the fire with a historical novel, whether camping under the stars or by the hearth at home. I soak up the sun whenever I can, and chocolate is my go-to energy booster.
I’m obsessed with red berry and pistachio cheesecake and can’t start my day without a good coffee with milk. I enjoy eating as much as I love quietly soaking in breathtaking landscapes, letting nature fill me up with energy.
Traveling is my addiction. Exploring new places and cultures has been my greatest teacher and a path to discovering myself. Over the years, I’ve had the joy of photographing couples from over 25 different countries, collecting beautiful love stories along the way.
I’m surrounded by an amazing group of friends and a supportive family who cheer me on every step of the way. I truly believe that gratitude brings a daily dose of sunshine to your life.
