– Planifiquemos juntos las sesiones de fotos y los horarios de la ceremonia.
La fotografía se trata principalmente de captar momentos a través de la luz. Si la sesión de fotos y la ceremonia principal se desarrollan en los horarios indicados, podremos capturar imágenes preciosas, sin necesidad de utilizar un flash externo, que será molesto y distractivo.Una ceremonia de día hace que el amor se luzca ¡en todo su esplendor!
– Anímense a hacer la sesión Preboda.
A muchos les da vergüenza o creen que pasarán mucho rato posando, pero la verdad es que la sesión preboda es una excusa para conocernos y divertirnos, para jugar y reír.
Imagínense encontrar fotos de sus papás o sus abuelos riendo a carcajadas, compartiendo un picnic o paseando por el bosque. Sería como espiar un poquito en la intimidad de la pareja y sus momentos compartidos. ¿Qué más lindo que tener un registro de aquello que los hace felices?
Aparte, haber compartido una tarde de charlas y clicks, les permitirá estar más cómodos con mi presencia el día de la boda y a mi me ayudará a retratar su esencia más profunda y sincera.
– Cásense de día.
Las ceremonias al aire libre son mis preferidas. Ese toque mágico y descontracturado que nos regala el sol cuando empieza a atardecer, sumado al espectacular lugar donde vivimos, crean el escenario perfecto para celebrar su boda.
Sus invitados disfrutarán de un ambiente más placentero, relajado y libre, con espacio para reir y bailar sin limitaciones.
Y en caso de que prefieran los casamientos nocturnos, les recomiendo comenzar con la ceremonia unas dos o tres horas antes del atardecer, para que, si deciden realizar la sesión de fotos posterior a la iglesia o civil, contemos con una hora más de luz y sus fotos sean realmente mágicas. Así podrán disfrutar también de la fiesta en la noche, con todas sus luces y sus colores.
– Prepárense en un ambiente amplio y luminoso. Las horas previas a la boda son muy especiales! Es un momento de mucha emoción, de nervios, de alegría y de encuentro con los seres más queridos que los acompañan durante el proceso. Estar en un lugar bonito, ordenado y cómodo les permitirá sentirse más a gusto, más tranquilos.
Tengan algo rico para tomar, a sus amigos para charlar y relajar el estrés, o a un hermano/a que te ayude a ponerte el vestido o a arreglarte el moño.
También les sugiero tener a mano los zapatos, anillos, ramo, invitaciones y cualquier cosita que quieran sumar para las fotos de detalle.
Acá les dejo algunos CONSEJOS DE MAQUILLAJE Y PEINADO.
– No corran.
Dispongan de tiempo, disfruten su día. Un timing ajustado provoca mucho estrés cuando no llegamos a cumplir los horarios.
Dejen siempre media hora libre antes de la ceremonia. Si se hace tarde podrán aprovecharla y si les sobra tiempo podremos hacer unos hermosos retratos.
– Si se animan, encuéntrense antes de la ceremonia.
Yo sé que la tradición indica que el novio no debe ver a su futura esposa hasta el momento de la iglesia, pero créanme, no hay nada más lindo e íntimo que ese encuentro previo.
Encontrarse antes en un lugar tranquilo, tomarse las manos, mirarse a los ojos y respirar les ayudará a relajarse, a reencontrarse y recordar por qué se eligieron para caminar juntos en la vida.
Y si contamos con tiempo, podremos capturar las tomas más dulces del día.
– Tengan una ceremonia «unplugged».
Lamentablemente hoy en día pasamos más horas frente al teléfono que mirándonos a los ojos. Nos hemos olvidado que presenciar algo en cuerpo y alma es abrazar la experiencia entera, y hacerlo a través de una tablet o teléfono nos desconcentra. Si quieren que sus invitados se conecten al 100% con ustedes y con ese hermoso y emotivo momento, pídanles que apaguen y guarden sus celulares durante la ceremonia.
Además, aunque a veces suena tentadora la idea de tener miles de fotos de distintos ángulos, el tío con la cámara nueva, la amiga con el teléfono, o el sobrinito con la tablet, han arruinado fotografías importantísimas durante las ceremonias.
Teléfonos apagados, que yo me encargaré de que no falte ningún click.
– Rompan las reglas.
La boda es suya, hagan lo que los haga felices. Si les incomoda el traje o quieren usar zapatillas, si prefieren bailar rock en vez del vals, si les gusta comer sentados en el césped, háganlo. Es su día y está para que lo disfruten, no se aten a protocolos y ceremonias que les sean ajenos, no hay nada más lindo que ver una pareja feliz y “en su salsa”.
– Si hay muchos niños, preparen un sector especial para ellos.
Si los peques tienen un rincón pensado para ellos, no sólo se van a divertir mucho más, sino que sus papás podrán relajarse y disfrutar de la fiesta junto a ustedes, sin tener que volver a casa temprano porque ellos se aburren o no tienen donde descansar.
¡Hay miles de opciones! Pueden buscar juegos, castillos inflables, colchonetas y mantas para la hora de dormir.
Y si tienen a alguien que pueda cuidarlos y encargarse de ellos durante la fiesta, mejor aún 😉
– Si la fiesta es de noche, pídanle al DJ que ilumine bien la pista.
¡Que comience la fiesta! No hay nada más divertido que la parte del baile y mi objetivo principal es captar las emociones, cosa que logro pasando desapercibida. Una pista bien iluminada permite fotografiar a los invitados sin disparar flashes externos que los distraigan y ayuda a crear fotos llenas de color y alegría. Otro dato: el laser y el humo excesivo sólo van a estropear tus fotografías. Charlen con el dj e iluminador sobre que música les gusta, cambien el humo por papelitos y el laser por buenos spots de colores!
– Por último: DIVIÉRTANSE!
Es el día de su boda, bailen hasta descoser sus zapatos y sean felices!
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